viernes, 27 de noviembre de 2009


Ha pasado casi una semana desde que inaguré el blog y en la anterior entrada se me quedó por explicar algo muy importante: el significado de emocionar, porque mucha gente se piensa que emocionar es inducir la producción de secrecciones lacrimógenas o lo que es lo mismo de lágrimas y no es eso, va más allá.
Para mí significa el que se encienda la bombilla y digas, oye pués no me había dado cuenta de eso, y digo "para mí" porque la emoción es una reacción subjetiva, cada persona ante el mismo estímulo reacciona de una manera diferente: habrá quien se ría y quien llore o a quien le de por pensar pero todas ellas habrán sufrido un cambio: habrán reflexionado inconscientemente sobre el asunto que sea.

Esto es lo que me gustaría conseguir que ocurriera en cada una de las personas que lean las futuras entradas del blog, si no lo consigo no importa porque por una vez voy a ser un poco egoista: este blog es también una manera de desahogarme, de dejar que mis pensamientos fluyan y en definitiva de liberarme a mí, de manera que pueda empaparme de mis propias reflexiones siempre que quiera.
Aunque bien es verdad que me hizo mucha ilusión el que dos personas me hicieran alusión al blog ya que pensaba que nadie lo había leído y eso siempre "emociona" y motiva a la persona que escribe y más aún si son comentarios positivos, no significa que la ausencia de estos hagan que deje de escribir, tan solo significa el no haber conseguido la finalidad propuesta.

sábado, 21 de noviembre de 2009



Llevo desde el verano queriendo hacer un blog pero me daba miedo escribir o mejor dicho no saber hacerlo ¿cómo voy a saber si sé hacerlo o no si no lo intento? además ¿para qué sirve el miedo si no es para superarlo? pero hoy por fin lo he hecho, he dado el paso y no porque tenga tiempo porque la verdad no lo tengo, es que una vez leí que cuanto más estresado estás más inspiración tienes y quería aprovechar esa inspiración antes de que se esfumara.

Había otro problema, no sabía como titular el blog y puesto que es una parte de mí tenía que tener nombre propio, después de darle muchas vueltas he decidido llamarle Gotas de memoria por dos razones, la primera porque lo que vaya escribiendo en él va a ser eso mismo: gotas de memoria tanto de experiencias que me hayan marcado, como de cosas que en cualquier momento hayan pasado por mi mente; y la segunda porque es la banda sonora de una de mis películas favoritas. En un principio había pensado ponerle el nombre de esa película: "La ventana de enfrente" pero creo que gotas de memoria me gusta aún más ya que lo que más emociona de una película no es el argumento en sí, es la banda sonora y ese es el propósito de este blog: emocionar al que lo lea.