sábado, 19 de diciembre de 2009




El desvelo fue largo, tanto que escribi otra entrada:

Estoy enamorada,
de la sonrisa que no me has regalado;
enamorada,
de los ojos que aún no me miraron,
del beso que no nos hemos dado,
de la voz que no he escuchado,
y del poema que no me has dedicado;

¿Pero cómo puedo estar enamorada si aún no te he encontrado?
Porque te he pensado,
y cada vez que lo hago
siento un aleteo de mariposas en el estómago
mientras mi corazón late a un ritmo que había olvidado.

Por eso, quisiera conocerte y poder decirte en voz alta
lo que mis manos han escrito
y mis labios han callado,
porque sé que existes
y que un día estaré a tu lado.



Anoche no podía dormir y qué hice: escribir.

- He borrado una parte de mi pasado, si, la he borrado de mi vista, pero no de mi mente; ahí sigue lo que pensé, lo que te dije, lo que callé, todo, hasta tú sigues ahí dentro.

Y ¿Por qué? Porque en mi mente, te escribí con tipex de manera que nadie notara que estabas ahí para poder verte siempre que quisiera sin dar explicaciones y para que un día, si volvias a aparecer pudiera repasar cada palabra que escribí con boli teniendo en cuenta que de esa manera podría volver a borrarlo con típex cuando desparecieras de nuevo, algo a lo que estoy acostumbrada.

Así, que sé que aunque haya borrado tus mensajes no podré borrar lo que sentí al leerlos por lo que la próxima vez que aparezcas te escribiré a lapiz, para que el tiempo te borré sin dejar huella en el caso de que a mi se me olvidé la goma.

lunes, 7 de diciembre de 2009



Love Actually, otra de mis películas favoritas comienza así:
"Siempre que me siento pesimista por como está el mundo pienso en la puerta de llegadas del aeropuerto...".
Yo sin embargo al pensar en el aeropuerto me siento pesimista claro está que yo lo veo desde el otro lado: desde fuera de la puerta de salidas exáctamente.
Será mejor que me explique: el sábado pasado fui a despedir a unos amigos al aeropuerto nunca había estado en esa situación siempre había sido yo la que me había ido y había dicho "no os preocupeis, volveré pronto".

Para mí todas las despedidas habían sido duras porque había dejado atrás parte de mi vida pero ahora que lo he visto desde el otro lado creo que para la gente a la que dejas atrás es más duro aún porque si eres tú el que te quedas tienes que seguir con tu vida haciendo lo mismo que hacias antes como si nada hubiera pasado, pero ¿cómo vas a hacer lo mismo si hay algo que ha cambiado?. Todo sigue igual, como antes de que esas personas hubieran aparecido en tu vida pero es distinto a cuando empezaron a formar parte de ella: hay algo que no encaja, que falta; faltan tus amigos los que se han ido, y hay algo en su lugar, algo que no debía estar ahí: un hueco, un vacío imposible de llenar por mucho que lo intentes.

Cada día sigues con tu rutina pero esa rutina es diferente:
Te levantas miras hacia la puerta y la llave que colgaba de ella ya no está, tampoco hay desayunos nutritivos con nutella, más tarde cuando vuelves al piso esperas a que llegue esa persona, pero no llega nunca, ya no oyes sus pasos ni su voz; ya no escuchas sus risas ni el ruido de la escalera bajo sus pies, ya no cenas a las 12 de la noche ni hace falta que mires a ver si el agua está hirviendo porque ya no bebes infusiones a las 2 de la mañana ni por supuesto haces el ritual nocturno antes de irte a dormir, ya no escuchas las melodías de sus móviles ni la del tio cantando como un loco ni esa otra tan repetitiva, ya sólo hay silencio.

Es increíble como puedes acostumbrarte a una rutina y transformarla en tu estilo de vida en solo 2 meses y medio, pero más increíble aún es el no querer cambiarla aunque las personas que formaban parte de esa rutina ya no esté contigo.

viernes, 27 de noviembre de 2009


Ha pasado casi una semana desde que inaguré el blog y en la anterior entrada se me quedó por explicar algo muy importante: el significado de emocionar, porque mucha gente se piensa que emocionar es inducir la producción de secrecciones lacrimógenas o lo que es lo mismo de lágrimas y no es eso, va más allá.
Para mí significa el que se encienda la bombilla y digas, oye pués no me había dado cuenta de eso, y digo "para mí" porque la emoción es una reacción subjetiva, cada persona ante el mismo estímulo reacciona de una manera diferente: habrá quien se ría y quien llore o a quien le de por pensar pero todas ellas habrán sufrido un cambio: habrán reflexionado inconscientemente sobre el asunto que sea.

Esto es lo que me gustaría conseguir que ocurriera en cada una de las personas que lean las futuras entradas del blog, si no lo consigo no importa porque por una vez voy a ser un poco egoista: este blog es también una manera de desahogarme, de dejar que mis pensamientos fluyan y en definitiva de liberarme a mí, de manera que pueda empaparme de mis propias reflexiones siempre que quiera.
Aunque bien es verdad que me hizo mucha ilusión el que dos personas me hicieran alusión al blog ya que pensaba que nadie lo había leído y eso siempre "emociona" y motiva a la persona que escribe y más aún si son comentarios positivos, no significa que la ausencia de estos hagan que deje de escribir, tan solo significa el no haber conseguido la finalidad propuesta.

sábado, 21 de noviembre de 2009



Llevo desde el verano queriendo hacer un blog pero me daba miedo escribir o mejor dicho no saber hacerlo ¿cómo voy a saber si sé hacerlo o no si no lo intento? además ¿para qué sirve el miedo si no es para superarlo? pero hoy por fin lo he hecho, he dado el paso y no porque tenga tiempo porque la verdad no lo tengo, es que una vez leí que cuanto más estresado estás más inspiración tienes y quería aprovechar esa inspiración antes de que se esfumara.

Había otro problema, no sabía como titular el blog y puesto que es una parte de mí tenía que tener nombre propio, después de darle muchas vueltas he decidido llamarle Gotas de memoria por dos razones, la primera porque lo que vaya escribiendo en él va a ser eso mismo: gotas de memoria tanto de experiencias que me hayan marcado, como de cosas que en cualquier momento hayan pasado por mi mente; y la segunda porque es la banda sonora de una de mis películas favoritas. En un principio había pensado ponerle el nombre de esa película: "La ventana de enfrente" pero creo que gotas de memoria me gusta aún más ya que lo que más emociona de una película no es el argumento en sí, es la banda sonora y ese es el propósito de este blog: emocionar al que lo lea.